Pina es un tranquilo pueblo del municipio de Algaida, parece provenir del románico «pinna» que significa «peña», o de «Pinella» que significa depósito de agua. Tiene una zona de tierras muy fértiles dedicadas mayoritariamente al regadío y otra con cultivos típicos de secano: cereales, almendros, algarrobos, higueras.

El pueblo de Pina, Mallorca. Fuente.

Pina estuvo poblada desde muy antiguo, en los alrededores del pueblo encontramos numerosos restos arqueológicos: talayots y cuevas artificiales. Los vestigios de la época islámica destacan los sistemas hidráulicos del conjunto de la fuente.

Los lugares de interés del pueblo son la iglesia parroquial, Sa Creu, el Convento, la Fuente y el valle de Pina.


Fuente de Pina

Justo a la entrada del pueblo, se sitúa el armonioso conjunto de la fuente de Pina, un lugar en la espesa sombra de las hiedras, olmos y álamos, con bancales de piedra seca que corrigen el desnivel. La fuente es un qanawat islámico. A la izquierda están los lavaderos con seis pares de picas de piedra viva, cubiertos por un porche.

El valle de Pina y el mirador
Se trata de un hermoso valle, lo atraviesa un torrente que circula en dirección a la bahía de Alcúdia, nutrida por las aguas provenientes de Randa y Montuïri.

A la salida del pueblo en dirección a Sineu, hay un mirador desde el que se puede observar la magnificencia de este valle, una depresión rodeada de colinas de múltiple colorido.

El pueblo de Pina, Mirador

El pueblo de Pina, Mirador

El Convento
El Convento fue fundado en 1856. Posteriormente, se construyó un nuevo edificio al otro lado de la calle comunicándose con el antiguo convento a través de un puente. Dentro del convento hay un pequeño museo.

Creu de Pina
De estilo neogótico construida en 1908, situada a la entrada del recinto de la fuente. Figura el escudo de Pina y los nombres de los santos patronos, San Cosme y San Damián.

El pueblo de Pina, Mallorca

El pueblo de Pina, Mallorca

El pueblo de Pina, Iglesia

La iglesia parroquial de Sant Cosme i Sant Damià

Iglesia promovida y proyectada por el padre Gabriel M. Ribes según los modelos de iglesias que había conocido en sus estancias en Francia y en Italia. Se construyó en 1853, aprovechando la estructura de la anterior iglesia que databa de finales del siglo XVI. Posee dos torres de planta cuadrada con un templete coronado por las estatuas de san Cosme y san Damián en piedra de Santanyí.

Casi todo el espacio interior es cubierto por pinturas al fresco o sobre tela.