El erizo de Mallorca, de nombre común erizo moruno, es un mamífero que tiene todo el cuerpo, con excepción del vientre, recubierto de púas que miden sobre 1 milímetro de grosor por 2 o 2,5 centímetros de largo. Llega a alcanzar los 1.100 gramos de peso y a medir entre 22 y 29 centímetros de longitud total.
No tiene cuello y en su cabeza, los ojos son muy oscuros y pequeños, las orejas redondeadas y cortas, el hocico es puntiagudo. Sus patas son cortas y poseen 5 dedos cada una y están provistas de fuertes uñas. La cola también es corta.
Los machos son mayores que las hembras, y tienen el vientre de un color que varía entre el pardo oscuro y el pardo amarillento, mientras que el de las hembras es color ceniza.
En diferencia al Erizo común, su tamaño es menor y su coloración es más clara.
Sus orejas son más grandes y su frente prominente, existiendo una banda de separación entre el pelo y las púas. El erizo europeo no presenta “raya” en las espinas de la frente y tiene manchas oscuras en la cara.
Hábitat
Este animal vive en los bosques, garriga, zonas de monte bajo, arbustos, setos, matorrales, zonas de cultivo, y en general los lugares menos fríos y húmedos.
Alimentación y costumbres
La dieta del erizo de Mallorca es omnívora, caza y come insectos, larvas, miriápodos, caracoles, babosas, lombrices de tierra e incluso se atreve con ranas, ratones, lagartijas, culebras y víboras. Esta dieta se complementa con huevos y polluelos de aves que anidan en el suelo, bellotas y otros frutos.
Su actividad la desarrolla fundamentalmente de noche, puede ser visto desde el atardecer al amanecer. Su olfato está muy desarrollado, camina mucho y sabe nadar muy bien.
Los erizos llegan a vivir entre 7 y 10 años, aunque muchos son atropellados por los coches, siendo éstos su mayor amenaza además de la disponibilidad de hábitat.