Existen muchos perfumes en el mercado, pero solo uno se asocia inevitablemente con la Mallorca más íntima. El perfume Flor d’Ametler se elabora desde hace siete décadas a partir de la flor del almendro, un árbol típicamente mallorquín.
Flor d’Ametler
Flor d’Ametler es una fragancia tradicional, antigua, elaborada con procesos artesanos y cuya receta es guardada celosamente por la familia para no desvelar los componentes de un producto que ha sido del agrado de varias generaciones de mujeres y que ha sabido adaptarse a los nuevos tiempos.
El perfumista Miguel Ángel Benito es el propietario de la factoría, radicada en el Pont d’Inca (Marratxí) y fundada hace 70 años por Bernardo Vallori.
Elaboración del perfume
El proceso de elaboración del perfume comienza cada año en febrero con un fenómeno natural, la floración de los almendros, un bello espectáculo que tiñe de blanco los campos de la isla.
La recogida de las flores se realiza a mano y sin prisas, con el tiempo necesario para hacer la mejor recolección posible. La selección se realiza en el mismo momento y lugar de la recogida. Las flores permanecen de tres a cuatro años en maceración para extraer al máximo su esencia.
Flores de almendro
Una característica esencial del perfume es que cada frasco contiene -introducidas cuidadosamente a mano- pequeñas flores de almendro, símbolo y ofrenda natural de una de las especies más arraigadas de nuestra isla.
Flor d’Ametler se ha actualizado y junto al formato tradicional, el de toda la vida, se sitúa la versión clásica, la más demandada en la actualidad por mujeres con un perfil de edad entre los 35 y los 50 años. ‘Fresc’ es la fragancia más desenfadada de la firma mallorquina, especialmente indicada para mujeres jóvenes.
Otros productos de la colección, como ‘Desig’, ‘Classic’, ‘Tradicional’, las variedades de la línea fresca, la crema hidratante dermoprotectora, gel, champú, acondicionador, aceites, cremas faciales, tónicos, leche corporal, jabón y viales en formato de bolsillo demuestran la diversificación de una marca que combina una equilibrada mezcla de tradición y modernidad.
Como producto exclusivo que es, el perfume Flor d’Ametler tiene una producción limitada, de alrededor de 100.000 unidades anuales.
Se comercializa exclusivamente en Mallorca y desde hace seis meses también a través del sitio web corporativo, que recibe 10.000 visitas mensuales. Es un producto cien por cien turístico, ya que el 90 por ciento de sus clientes son extranjeros, principalmente franceses, alemanes e ingleses.
La factoría recibe numerosas visitas organizadas de grupos, que pueden conocer en sus talleres el proceso de fabricación. Sin duda todo un lujo para quien quiera conocer de cerca la flor del almendro, el aroma de Mallorca.