Salimos de Sóller. Cerca del cruce de la carretera de Deià veremos la primera indicación GR que se dirige hacia Ca n’Ai, un hotel rural de la zona.

 

Camí dels Pintors 

Pasadas las casas encontraremos una bifurcación: hacia la izquierda el Camí de Son Sales y por la derecha hacia el Port.

Podemos coger cualquiera de las dos opciones; la opción de Son Sales es directa hacia Can Bleda y en un principio no es más que una carretera asfaltada sin complicación.

En los cruces tenemos la señalización pertinente y pronto nos desviaremos para subir directamente por los olivares. Pasados éstos el camino recupera su antiguo empedrado para salvar el desnivel más acusado del camino. En el supuesto de que hubiéramos optado por dirigirnos al Port disfrutaremos de un hermoso paseo entre huertos hasta llegar a la altura del antiguo hotel Rocamar, y tomaríamos el antiguo trazado empedrado de gran belleza por el interior del bosque. No tiene problemas de orientación hasta las casas de Muleta Gran y desde allí a la carretera que baja a Alconàsser.

Camí dels PintorsTanto si vamos por un itinerario u otro tenemos que bajar por la carretera hasta cerca del mar y encontrar la barrera que debemos saltar y tomar el sendero costero que no abandonaremos en ningún momento. A partir de la segunda mitad del recorrido, junto a la playa del Canyaret, muy frecuentada por los clientes del hotel de Llucalcari y antiguamente por los lugareños ya que, cerca de la casa, brotaba una fuente de aguas muy frescas y gran caudal, el camino es más franco y fácil de seguir con lo que el recorrido hasta la cala de Deià es más un paseo que una excursión.

Desde la cala tenemos varias opciones para subir a Deià, todas ellas señalizadas. Para ello tomamos la carretera asfaltada y al llegar al puente decidimos allí nuestro camino de regreso al pueblo. El que está marcado como GR es el Camí de sa Vinyeta que nos acerca hasta la entrada del pueblo. Cruzando el puente tenemos el Camí des Ribassos, empedrado en sus inicios, con un desvío hacia la Pedrissa; si no nos importa caminar por asfalto unos kilómetros hasta el pueblo podemos tomarlo, pero si no nos desviamos recorreremos un bonito camino cerca del torrente que nos llevará directos al pueblo, pasando por delante del refugio de Can Boi.

Camí dels Pintors